Tras el COVID, muchos países siguen sin recuperarse de los efectos económicos que la pandemia trajo consigo. Más aún, con la presión del conflicto entre Rusia y Ucrania se ha precipitado la subida de precios en la energía y los minerales. Como consecuencia el mercado bursátil señala que los índices de referencia como el S&P500 o el NASDAQ100 se están dirigiendo a la baja.
Se especula que la tendencia bajista que se viene produciendo es la antecámara de una caída de mayor trayectoria. De acuerdo al juicio de los especialistas, este sería el comienzo de una fase de recesión. Hay quienes hablan de correcciones que oscilan del 20 al 50% en el NASDAQ100, debido en parte, a que muchas empresas tecnológicas ya no tienen el mismo empuje de antes. En consecuencia, se espera que bolsas del mercado internacional, en alguna medida, repliquen la caída de los índices americanos.
Ante una situación como esta, muchos se preguntarán qué hacer para conseguir rendimientos a pesar del marco desalentador en el que se encuentran. Veamos algunas alternativas partiendo de tus ahorros.
Trading en el mercado cambiario
Conocido también como Forex, este mercado está abierto de domingo a viernes las 24 horas, en él las empresas financieras optan por la compra y venta de monedas de diferentes países para ejecutar sus transacciones. La buena noticia es que cualquier ahorrador común puede participar en estas operaciones.
Lo interesante de hacer trading en este mercado es que, al invertirse en pares de divisas enfrentados, a pesar de un escenario económico con muy mal aspecto, siempre una de las divisas ganará valor en relación a la otra. Esto asegura que, incluso en periodos de recesión, haya ganancias. ¿Qué necesitas para invertir en mercado FX? Tener acceso a una computadora, Internet, abrir una cuenta en un bróker y conocer algunos fundamentos del análisis técnico.
Ponerse “en corto” en acciones y operar a la baja
Situarse en “posiciones cortas” o invertir “en corto” no es otra cosa que apostar por un activo que está en caída, de ello podemos sacar provecho. Todo reside en primero vender y luego comprar cuando los precios bajan.
Pongámonos en el caso de que las acciones de Twitter comienzan a devaluarse, esa sería la oportunidad para abrir una posición “en corto” por 307 dólares, siempre previendo que continúan con un recorrido a la baja. Esperamos que el precio haya alcanzado 270. De inmediato se cierra la transacción y tenemos una rentabilidad por la diferencia de 37 dólares por acción.
Compra de bonos
Los bonos generan rentabilidad fija a largo plazo porque tienen un vencimiento previsto. La amortización del bono se cumple con el pago por cupones, que pueden saldarse en cuotas de cada 3, 6 o 12 meses. Y ya que los bonos tienen una rentabilidad prefijada, siempre se sabe del beneficio que se puede obtener.